Dos frikis muy frikis dispuestos a enseñar bizarradas, cosillas nostálgicas y mucho más...
Además, seguro que no sabías que Hugh se duchaba con agua fría cada vez que tenía que interpretar su papel. La cosa empezó cierto día con un calentador estropeado, en el que después de tener que soportar el agua helada con los dientes apretados, Hugh se dio cuenta de que tenía ganas de pegar a alguien y destrozar cosas ¡El estado de ánimo ideal!
¡Saludos, inquietos gothamitas! Hoy os traigo una interesante pieza detrás de la cual llevo tiempo, y que pude conseguir hace pocos días. Nada más y nada menos que "Arkham City", de nuestro Orejas Picudas favorito.
Después de la crisis sufrida por la ciudad cuando el Joker se hace con la fórmula Titán (un compuesto químico que potencia físicamente hasta niveles increíbles a quien la consume), el alcalde de Gotham toma una resolución drástica: construir un gigantesco ghetto amurallado dentro del cual queden recluidos todos los supercriminales. La seguridad de esta ciudad-prisión correría a cargo de un equipo paramilitar privado, que se aseguraría de que toda la escoria humana permaneciera dentro, para mayor tranquilidad de la ciudadanía. Pero el alcalde no es la verdadera cabeza pensante del plan, y Batman debe lidiar con ese misterio al mismo tiempo que se enfrenta al nuevo estado de las cosas...
Vamos primero con los "peros". Personalmente, no puedo evitar establecer paralelismos y comparaciones con el arco argumental "Tierra de Nadie": un escenario cerrado, distópico y callejero donde impera la ley del más fuerte y cada villano intenta hacerse un hueco. No es que la idea esté copiada, pero se parece, y "Tierra de Nadie" dejó el listón muy alto. Algún día haremos la reseña de esa saga. Tampoco nos queda muy claro los motivos por los cuales el verdadero instigador de Arkham City (no nombres, no spoiler) quiere montar ese tinglado. Pero eso quizás se explique en números posteriores, que en cuanto sea posible añadiremos a nuestra comicteca.
Dejando a un lado este par de detalles (y si no habéis leído "Tierra de Nadie" no tenéis por qué preocuparos del primero) estamos frente a un buen cómic de Batman: trama enrevesada, villanos bien tratados (seguramente vuestro favorito no salga tanto como os gustaría, pero es que es difícil hacer malabarismos con muchas bolas) y el Murciélago tiene ocasión de demostrar su destreza en la lucha, la infiltración y la investigación (que se supone que es el mejor detective del mundo, algo que ciertos autores olvidan). El apartado gráfico está muy bien resuelto, y la trama es ágil e intensa. Ojalá en la continuación de esta historia se mantenga (o supere) este nivel de calidad. Por esto, le doy a "Batman: Arkham City"...
(1 Frikipunto: no te pierdes nada por no leerlo / 2 Frikipuntos: Psche... / 3 Frikipuntos: Ey, está bien / 4 Frikipuntos: Esto está muy guay / 5 Frikipuntos: IMPRESCINDIBLE)
Porque cualquier opción sexual es legítima mientras haya amor y respeto, Tutti-Friki se suma sin dudarlo al evento de esta semana y os traemos esta magnífico póster de DC.
Hoy es Noche de San Juan ¿y quién mejor para patrocinarla que nuestro demonio investigador de lo paranormal favorito, el genial Hellboy? ¡Va para vosotros este sensacional gif animado!
Y por cosas como estas es por lo que estamos enamorados de los personajes y el trasfondo de Overwatch. Esta cinemática es de lo más épico que nunca hemos visto, la música es sensacional y el conjunto nos pone los pelos de punta cada vez que vemos el tráiler. Consejo: pulsad en el recuadro inferior derecho para verlo en grande. Y por si sirve de algo insistir:
¡Queremos la peli de Overwatch!
¡Hola a todos, fanáticos de los calzoncillos por fuera! ¿Nunca os habéis preguntado por qué un superhéroe tan superpoderoso como Superman se limitaba a atrapar villanos de tercera cuando sería capaz de hacer mucho más? ¡Pues Paul Dini y Alex Ross sí lo hicieron! Y el resultado es este: "Superman: paz en la Tierra", del que hoy os vamos a hablar.
Es Navidad, tiempo de villancicos, nieve, abrazotes y árboles con lucecitas. Mientras el bueno de Supes hace una aparición estelar para el público, repara en una niña tirada en la calle, que está a punto de morir de desnutrición. A raíz de este incidente, le entra la venilla redentora y se plantea luchar contra el hambre en el mundo durante veinticuatro horas, de cara a servir de inspiración para el resto de las personas.
La premisa es buena, y el dibujo de Alex Ross es, como de costumbre, un alucine. Su estilo realista hace que pensemos que estamos leyendo sobre cómo serían estos superhéroes en el mundo real. Del final no diremos nada, pero nos parece correcto. Si alguna pega hay que ponerle a esta pequeña novela gráfica es precisamente ese: es pequeña. El argumento necesitaba más desarrollo, más detalle, más extensión. Uno se queda con la impresión de que la historia queda resuelta demasiado rápido porque algún editor de ceño fruncido le ha dicho a los dos chicos "¡No más de sesenta páginas!"
(Claro que, si os sigue reconcomiendo la duda de por qué el kryptoniano no arregla el mundo de una vez por todas, otros autores han dado otras respuestas. Para otro día os hablaremos de "Injustice: Gods among Us". Os vais a quedar de piedra.)
"Superman: Paz en la Tierra" es una buena historia, un enfoque maduro y realista (nos mola mucho esa perspectiva, que vuelve a nuestros héroes favoritos más verosímiles) sin robots asesinos ni estrellas de mar gigantes alienígenas. El apartado gráfico es una delicia. Y te hace pensar. Es solo eso: que parece (al menos a nosotros, que conste) un poco condensada, acortada. Pero ese detalle no le resta mérito a todo lo demás. Merece la pena. Por eso le damos...
(1 Frikipunto: no te pierdes nada por no leerlo / 2 Frikipuntos: Psche... / 3 Frikipuntos: Ey, está bien / 4 Frikipuntos: Esto está muy guay / 5 Frikipuntos: IMPRESCINDIBLE)
Conocíamos de antes la línea de juegos "Timeline", en la que tienes que tirar de culturilla general para ordenar de forma cronológica inventos, películas, sucesos históricos, etc. Cuando vimos que existía una versión "Marvel" del sistema de juego, no nos pudimos resistir. Por eso, hoy vamos a reseñar el juego "Cardline".
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| Cardline: una minienciclopedia de súpers en tu bolsillo |
"Cardline" sigue la misma mecánica que "Timeline", es decir, tendremos en nuestra mano una serie de cartas que, por turno, tendremos que situar ordenadamente en una línea según unos valores numéricos que no vemos (pero que tenemos que saber, o por lo menos sospechar; están en el anverso de cada carta). Si nos quedamos sin cartas en la mano antes que el resto de los jugadores, ganamos. Como veis, el sistema es más simple que el mecanismo de un chupete. En "Cardline" tenemos un pequeño refinamiento, y es que hay tres tipos de valores (y no solo fechas) con los que podemos jugar: Fuerza (medida en la cantidad de kilos o toneladas que puede levantar), Inteligencia o Destreza en el Combate. Por cierto, pueden jugar de 2 a 8 jugadores, y en el pack (de tamaño muy manejable) nos vienen 110 cartas. Un buen número, y aunque echamos en falta algún que otro personaje (lo siento, nos cae simpática la Chica Ardilla) en lugar de otros, entendemos que siempre hay preferencias personales.
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| ¿Tiene Cohete más Destreza que Iron Man o que el Escorpión? |
El juego tiene un pequeño "pero". Mientras que en Timeline se puede comprobar oficialmente que la Revolución Francesa ocurrió en 1798, no hay un canon numérico oficial que diga que la Viuda Negra tiene un 127 en Inteligencia o que Daredevil puede levantar 310Kg (¡!). Así que hay que tirar un poco de intuición y frikicultura comiquera y cruzar los dedos para que El Vigía tenga más fuerza que Ultrón pero menos que Hulk. De hecho, jugando nos hemos encontrado con cosillas que chirrían, como que el Dr. Octopus tiene más Destreza en Combate que Iron Man (será por los brazos extra). Y ¿de verdad Cráneo Rojo tiene más Inteligencia que Odín? Pobre Padre de Todos, sacarse un ojo para eso...
Pero si uno no se toma estas cosas demasiado en serio, servirá para echarse una risas. Por otro lado, el formato es superágil (las partidas son muy rápidas) y pica bastante, deseando echar una revancha una y otra vez. Un buen "filler" para satisfacer la venilla friki superheroica. Eso sí: quisquillosos, abstenerse.
Diversión: ***
Dificultad: *
Rejugabilidad: ***
Estética: ***
Spidey, Kraven el Cazador y el Lagarto hacen una pausa en su pelea para posar para la foto de una admiradora. ¡Qué guapos todos! Las figuritas las hemos conseguido en la tienda de La Voladera, en Madrid. Si sois aficionados a los legos, no dejéis de pasaros por allí.
Estamos releyendo "El Vellocino de Oro" de Robert Graves y nos hemos acordado de esta magnífica película, la buena, la original, la de 1963. Recuerdo que cuando veía esos magistrales efectos especiales a cargo del sin par Harryhausen los consideraba lo más de lo más (y aún lo sigo haciendo). Son pura magia, y las películas en las que participaba me ponían (y aún me ponen) la imaginación a mil. Y es que cuando algo es genial, sigue siéndolo a pesar del tiempo. Si aún no la habéis visto, merece la pena que visitéis este clásico ¡No os lo podéis perder!
¡Hola, pequeños profundos de la húmeda R'lyeh! Hoy os traigo una espeluznante muestra de qué se puede conseguir con una plumilla y un poco de truculencia. "Desde la oscuridad" es una compilación de siete historias de terror del genial Avilés. Hay de todo: desde relatos de tintes lovecraftianos hasta adaptaciones de Poe y Hodgson (un relato, por cierto, que haría estremecerse de gustirrinín al bueno de Howard).
Como podéis ver por las fotos, el arte de Avilés está más que a la altura del cometido. El dibujante malagueño da muestras de versatilidad en el estilo en los siete relatos, pero además lo borda como guionista. A mi juicio, las historias de Poe no son fáciles de llevar al cómic, pero su "Berenice" cumple perfectamente, acompañando la prosa del escritor con unos dibujos que transmiten angustia y un gradual descenso a la locura. La adaptación del cuento de Hodgson "The derelict" es, en mi opinión, lo mejorcito del álbum, mientras que "Cuestión de enfoque", a pesar de partir de una idea interesante y tener un arte gráfico tan bueno como las demás, se me queda un poco floja por el modo en que termina.
El cómic incluye unas páginas de material extra con los bocetos de varias páginas y diseño de personajes, esa clase de cosas que nos sirve para enseñarnos cómo trabajan los profesionales en comparación con las chapucillas que a veces nos da por hacer en casa y que luego exhibimos con gran orgullo, je, je.
En resumen, un cómic muy bueno para leer por la noche, y que puede picar a más de uno para acercarse a algunos de los relatos que adapta. Se queda un poco corto en extensión (de siete a diez historias ¿qué más daba?) pero visualmente es una delicia. Por todo ello, le doy...
(1 Frikipunto: no te pierdes nada por no leerlo / 2 Frikipuntos: Psche... / 3 Frikipuntos: Ey, está bien / 4 Frikipuntos: Esto está muy guay / 5 Frikipuntos: IMPRESCINDIBLE)
No dirás que no. Está cachas, es multimillonario, lleva un traje que - según Arturo y Juan - vale 700 millones de dólares (lo han calculado), tiene mogollón de bat-juguetes y, por si fuera poco, tiene un mayordomo que le lleva sandwiches y se ocupa de todo. Así cualquiera puede ser un súper.
"Batman mola más que tú" es la monografía que todos los fans del Hombre Murciélago esperaban: un montón de datos sobre la historia de su creación y en qué personaje se basó su autor (aunque al final terminó siendo más original que el original ¿O alguien se acuerda de El Avispón Verde?), algunos datos sobre sus superenemigos y secundarios, bocetos y portadas antiguas (algunas que dan un poco de vergüenza ajena, como la de Batman en Escocia), y tope de curiosidades y cotilleos sobre las pelis. Y la serie de los sesenta, por supuesto. Porque los Batman de ahora estarán todo lo bien que quieras, pero los que nos criamos con ese festival de colorines y onomatopeyas tenemos reservado en nuestros frikis corazoncitos un lugar para Adam West y Burt Ward, ese improbable e insufrible Robin que nos martilleaba los oídos con joyas como "¡Santo robot a control remoto, Batman!"
En definitiva, Batman mola mucho más que tú, que yo y que todos nosotros. Por eso se mantiene en forma después de tantas décadas. Ya nos gustaría ser como él. Este libro no conseguirá que seas como Batman - solo logrará que sientas un montón de envidia cochina - pero te lo pasarás batpipa mientras lo lees, y eso es molar un poquito como Batman.
Ahora que empieza a hacer calor ¿por qué no irnos hasta el Polo Sur, ponernos en el plumaje de un grupete de pingüinos y zambullirnos en las aguas heladas para capturar ricos peces? Esto es lo que nos propone "Pingüinos", un sencillo y divertido filler de la editorial Edge, y que os vamos a reseñar hoy.
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| El tablero dispuesto para comenzar |
Se trata de un juego para entre 2 y 4 jugadores, de 8 años en adelante y con una duración por partida que no llega a los 15 minutos. Que no os engañe la edad ni el aspecto simpático de tanta ave, porque "Pingüinos" es un juego de esos que se prestan a puñetear al compañero al mismo tiempo que debes buscar cómo sacar tú la mejor tajada. Y es que nuestro objetivo será ir capturando las losetas con más pescados (que son los que nos darán puntos al final), con una interesante regla: cada vez que abandonamos una loseta, ésta desaparece del tablero (suponemos que porque la plataforma de hielo se hunde o se funde, maldito calentamiento global), con lo que el terreno de juego se va a volver cada vez más laberíntico y reducido ¡Si no hacemos las cosas bien, el oponente puede dejar a nuestros pingüinetes aislados!
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| El tablero está lleno de ricos peces para recolectar |
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| El pingüi amarillo maldice porque el azul no le deja pasar... |
El juego es muy dinámico, con una buena dosis de estrategia (sin llegar a niveles de Risk), mucha interacción entre jugadores y termina rápido a no ser que esté participando uno de esos que meditan cada decisión como si se tratara de invadir o no Rusia. Las losetas son de muy buena calidad, y las figurillas de plástico (cuatro por cada jugador) son lo más cachondo del juego. En resumen, la estética está muy bien lograda, las reglas se aprenden en medio minuto y cabe fácilmente en la mochila para llevarlo a cualquier lado. Además, su precio es bastante económico (poco más de 12 euros). Muy recomendado para rellenar huecos entre partidas, mientras se espera a que llegue el tardón del grupo o para fantasear que se está en la Antártida cuando al otro lado de la ventana hay cuarenta y cinco grados a la sombra.
Diversión: ***
Dificultad: *
Rejugabilidad: ***
Estética: ****
